
domingo, 26 de julio de 2009
Seduccion masiva

Al correrse la voz sus amigos, le pedían consejos que siempre eran acertadísimos y afortunados:
- Analizar el terreno
- Estudiar la colocación, siempre avanzar lo justo, ni lejos, ni cerca
- No rendirse, un 'no' no siempre es un 'no' (aunque a veces si)
- Abrir siempre la puerta
- No interrumpirlas cuando hablan (aunque apetezca)
- Acercarles la silla a la mesa
- Recordar todas sus fechas importantes y mandarles flores, siempre con una tarjeta.
- Regalar flores y pequeños obsequios (no son regalos son deseos y hacérselo saber)
- Utilizar las viejas formas del galanteo clásico
Se modo que nuestro amigo descubrió tambien el difícil arte de enriquecerse rapidamente, eligió esa población para iniciar su pequeño negocio, por el módico precio de 1.500 € y dos días se ofrecía un curso completo de 2 días, con resultados garantizados, el precio incluye el alojamiento, y los secretos más bien guardados.
Su publicidad solo indica:
"Academia Amatoria Jairo
El curso es fundamentalmente práctico. Hacemos dos horas de teoría y el resto se lleva a cabo sobre el terreno. Se harán prácticas en diversos escenarios:
Discotecas. Bares. Playa. Supermercado.
Monitores cualificados harán primero una demostración. Resultados garantizados".
Lo verdaderamente interesante de esta historia es que paralelamente Jairo montó otra academia en una población cercana solo para mujeres 'El Arte de dejarse seducir', en el precio se incluye un viaje organizado a Riccione.
sábado, 25 de julio de 2009

Mirame...lo haces, lo sé y me excita, me acerco donde estás...pienso que me siento sobre tus piernas, a horcajadas, abierta para ti.
Mira mi lengua chupando mis hombros, como me gusta recrearme, en que me veas como mis pezones crecen para ti, con tus labios, ... lo hago poco a poco, voy acariciándote sobre el pantalón, te desabrocho la correa, bajo hasta tu cremallera con los dedos, sin dejar de mirarte y haciendo que tu me mires, te siento excitado, ...no sabes cuanto, cuanto deseo chupar esa polla que se está despertando, el deseo de sentirse deseada......
Deslizo los dedos por tu ropa intima para descubrir ahí tu pene, delicioso, duro...Comienzo a chuparte la polla lentamente, esta dura y húmeda, sabrosa y excitante, poco a poco bajo tu pantalón totalmente con un poco de dificultad mutua, pero con tanto deseo, que logro dejarte desnudo, recorriendo con mis labios y lengua cada milímetro...Dejo de hacerlo y me paro, quedando frente a ti me estoy acariciando semidesnuda para ti...
jueves, 23 de julio de 2009
Bailando Pintados de Plata

Siempre que veo este video me quedo con la mente en blanco, embobado, tiene algo que me engancha, siempre que relacionas un tipo de musica con algún tipo de actividad en este caso surf, colegas, mar, viajes, por eso estos bailes improvisados nos recuerdan escenas de deportes extremos.


baile hot plata red chili peppers desierto give away
martes, 21 de julio de 2009
Miedo en el Cuerpo

Alguíen o algo, en lo que tú piensas que por un momento, y que al darte la vuelta te dará un golpe en la crisma y se pasará contigo?
Pués bien.....Todo comenzó un fin de semana, por el cumple de una de mis amigas, decidimos ir las cuatro, a una casa rural en un pueblo rústico, que encontramos por Internet increiblemente barata, así que pertrechadas con unas mochilas llegamos en tren tras dos largas horas de viaje, y nos encontramos una casita pequeña pero acogedora, olía a madera vieja.
'T', saco el portátil de la mochila y empezó a prepararlo todo para ver un DVD, saqué un montón del videoclub, 'F' (perdonar que no de detalles de los nombres) prefirió prepararlo todo para pasar una noche de miedo así que se pilló unos comics de Creppy (no sabía que aún existiese). A 'C' le dió por depilarse.
Yo no sabia por donde empezar así que fui a mi cuarto para acomodarme en “ esa noche loca”, de modo que me di una ducha, mientras estaba en el cuarto de baño, comencé a escuchar un ruido como de pisadas, que cada vez se hacia mas fuerte, el ruido venia de la habitación de al lado, mi curiosidad me hizo acercarme a aquella habitación, mientras escuchaba como mi corazón se aceleraba y mi respiración se volvía mas profunda, me encontraba en el marco de la puerta y seguía escuchando las dichosas pisadas.
Una vez dentro vi las ventanas entreabiertas, golpeando contra el marco, de ahí procedía ese horrible ritmo que me estaba volviendo loca, me acerque para ver que era con ese sudor frío recorriendo mi cuerpo como si alguien estuviese detrás de mi, acechando…me daba miedo girarme.
Pensé:
“ Mira que eres miedica, es todo producto de tu imaginación no pasa nada aquí no hay nadie tranquila…”
No sé porqué me di la vuelta violentamente, descubrí en la oscuridad de la habitación una silueta, me puse a gritar, cuando acostumbré los ojos a la oscuridad, descubrí a aquel tio, era un 'okupa' rubio, alto super atractivo, parece ser que vivía en aquella casa destartalada.
Una vez pasado el susto, se presentó se llamaba Gabriel, encima era simpatiquísimo, se ofreció a hacernos la cena, cocinaba que te cagas, Gabriel vestía ropa tipo 'surfer', pantalones super bajos, 'T' como siempre hizo una de sus gracias y mientras cocinaba, agarró sus pantalones por las caderas y con un gesto le bajó los pantalones, el caso es que estaba muy bien dotado, como ya llevabamos un rato bromeando y bebiendo, nos pusimos aún más cashondas, yo ya no podía más, rompí el hielo y como jugando le acabé de bajar el bóxer, saqué su polla, le bajé la piel del capullo y le hice una chupadita,

-¡A mi, a mi!
-¡Ahora me toca!
-¡Acaba ya guarra que estamos esperando!
-¡Dejamelo a mi!
El caso es que cuando nos fuimos aún estaba inerte en el sofá, yo kreo que haciéndose el dormido, supongo que sería un coma sexual de esos, no siempre un tio pilla cuatro hembras juntas que quieren ser folladas.
Miedo en el Cuerpo

Alguíen o algo, en lo que tú piensas que por un momento, y que al darte la vuelta te dará un golpe en la crisma y se pasará contigo?
Pués bien.....Todo comenzó un fin de semana, por el cumple de una de mis amigas, decidimos ir las cuatro, a una casa rural en un pueblo rústico, que encontramos por Internet increiblemente barata, así que pertrechadas con unas mochilas llegamos en tren tras dos largas horas de viaje, y nos encontramos una casita pequeña pero acogedora, olía a madera vieja.
'T', saco el portátil de la mochila y empezó a prepararlo todo para ver un DVD, saqué un montón del videoclub, 'F' (perdonar que no de detalles de los nombres) prefirió prepararlo todo para pasar una noche de miedo así que se pilló unos comics de Creppy (no sabía que aún existiese). A 'C' le dió por depilarse.
Yo no sabia por donde empezar así que fui a mi cuarto para acomodarme en “ esa noche loca”, de modo que me di una ducha, mientras estaba en el cuarto de baño, comencé a escuchar un ruido como de pisadas, que cada vez se hacia mas fuerte, el ruido venia de la habitación de al lado, mi curiosidad me hizo acercarme a aquella habitación, mientras escuchaba como mi corazón se aceleraba y mi respiración se volvía mas profunda, me encontraba en el marco de la puerta y seguía escuchando las dichosas pisadas.
Una vez dentro vi las ventanas entreabiertas, golpeando contra el marco, de ahí procedía ese horrible ritmo que me estaba volviendo loca, me acerque para ver que era con ese sudor frío recorriendo mi cuerpo como si alguien estuviese detrás de mi, acechando…me daba miedo girarme.
Pensé:
“ Mira que eres miedica, es todo producto de tu imaginación no pasa nada aquí no hay nadie tranquila…”
No sé porqué me di la vuelta violentamente, descubrí en la oscuridad de la habitación una silueta, me puse a gritar, cuando acostumbré los ojos a la oscuridad, descubrí a aquel tio, era un 'okupa' rubio, alto super atractivo, parece ser que vivía en aquella casa destartalada.
Una vez pasado el susto, se presentó se llamaba Gabriel, encima era simpatiquísimo, se ofreció a hacernos la cena, cocinaba que te cagas, Gabriel vestía ropa tipo 'surfer', pantalones super bajos, 'T' como siempre hizo una de sus gracias y mientras cocinaba, agarró sus pantalones por las caderas y con un gesto le bajó los pantalones, el caso es que estaba muy bien dotado, como ya llevabamos un rato bromeando y bebiendo, nos pusimos aún más cashondas, yo ya no podía más, rompí el hielo y como jugando le acabé de bajar el bóxer, saqué su polla, le bajé la piel del capullo y le hice una chupadita,

-¡A mi, a mi!
-¡Ahora me toca!
-¡Acaba ya guarra que estamos esperando!
-¡Dejamelo a mi!
El caso es que cuando nos fuimos aún estaba inerte en el sofá, yo kreo que haciéndose el dormido, supongo que sería un coma sexual de esos, no siempre un tio pilla cuatro hembras juntas que quieren ser folladas.
lunes, 20 de julio de 2009
Entre hembras anda el juego

Gritaban y decían tonterías. Parecía que me estaban esperando, me acosaron cada una por cada lado, diciendo groserías sobre las tetas que tenía y si les quería ver lo grandes que tenían las suyas. Intenté levantarme pero me retuvieron.
Un hombre circulaba por ahí y le obligaron a huir, diciendo: "¿Qué tienes que ver tú con esa zorra? Vas a ver, baboso, lo que es follarse entre hembras".
Mientras una de las energúmenas me retenía, la otra ya me había sacado la blusita rompiendo de golpe todos sus botones y me había subido la falda hasta la cintura. Vieron mis braguitas blancas y se excitaron sobremanera, así que siguieron con mi humillacion.
-¡Te haremos correr guarra!
Me dijeron y al negarme, una me cogió por los pelos, la otra me abrió la boca me introdujo una bola.
Mientras me forzaban se carcajeaban, me sacaron las bragas a lo bruto y así como estaba sentada me metieron su lengua en mi rajita. Sentía su saliva en mi coño y mi clítoris, sin querer empecé a calentarme y soltar juguitos.
Lo notaron de inmediato y añadieron
-A esta puta le está gustando. le vamos a meter unos dedos bien dentro.
Y me penetró con brutalidad mientras yo jadeaba sin control y escuchaba los gritos de placer.
El caso es que he vuelto a pasear por aquel barrio para decir que las perdonaba, pero no las volví a ver ;-(
Mantener la atencion es dificil
sábado, 18 de julio de 2009
Donde las dan las toman
Dos horas interminables de reunión, tensión en el ambiente, agotamiento mental, la empresa no es viable, contención de gastos, nadie es imprescindible, es decir que para que la empresa funcione, algunos sobramos, hay que trabajar duro para rentabilizar este proyecto, etc. etc.
La atractiva secretaria, trajo unos bocadillos y unas cervezas para distensionar el ambiente. Mientras movía la mandíbula con desgana, se me escapó una mirada, intenté disimular, pero una sonrisa, demostró que había quedado en evidencia, estaba distraido con ese triángulo oscuro que se formaba a través de su falda ligeramente subida, a través del vidrio de la mesa.

¿Estaría conjuntado con el resto de su indumentaria? Ocurrencias obscenas, pero relajantes, de modo que propiné un trago largo a la cerveza y mientras su frio sabor inundaba mi garganta, inesperadamente cruzó las piernas, me dió morbo pués esto significaba que a pesar de su indiferencia, estaba pendiente de mi mirada extraviada.
Pude percatarme que no usaba ropa interior… me ruboricé al descubrir que miraba atentamente mi reacción, mi cara debió delatarme, pensé que cerraría las piernas al sentirse observada, hizo justo lo contrario, parecía empeñada en que no acertara ni una pauta de su seductor comportamiento.
Me excité muchísimo, pero lo disimulé, cruzando mis propias piernas para abortar los efectos de la excitación, otro trago, esta vez mirando solo el botellín, concentrándome en descifrar su etiqueta.
Desde luego no iba a permitir que se notaran mis debilidades por las piernas de la 'secre'.
Cuando todos entraron en sus despachos colindantes, quedamos a solas en la sala, me ofrecí a ayudarla a recoger los restos del almuerzo, se paró frente a mi…
Me estaba tentando, con una franca sonrisa, mirando descaradamente hacía mi entrepierna, como se abultaba mi 'paquete' al compás de sus movimientos, sabiendo que estabamos relativamente solos en la sala de reuniones.
Notó mi nerviosismo, se sentó a mi lado, surgió una superficial conversación, acerca de lo bien que escribían los bolis 'bic' de última generación, lo bien que se adaptaban en la mano, sobre la suavidad de los nuevos tipos de folios, lo bien que queda la tinta azul sobre el papel blanco, era excitante comprobar como esa conversación metafórica fluía sin parar, el tono de la voz eran deliciosamente suave, con las palabras lentas y sensuales que se interrumpían por momentos, lo que nos obligaba a acercarnos, sustituyéndose a veces por largos intercambios de miradas, su perfume empezó a invadirme, eso me recordó la ausencia de ropa interior, un hecho que me costaba olvidar. Entonces sentí un dolor aprisionante, abrí las piernas para liberarme un poco, me gustó comprobar como la vista se le quedó fijada en la pirámide incipiente, que se había formado en la base de mi entrepierna, con la tela de mis pantalones claros de pinzas, ella no podía apartar la vista, dejé que el 'asunto' creciera, hasta que el mastil enhiesto dejó toda la salvaje evidencia al descubierto, rozaste con el dorso de tu mano mi entrepierna en un gesto aparentemente improvisado, devolví el cumplido táctil acariciando sus rodillas desnudas, eran muy suaves y estaban sudorosas.

Estabamos disfrutando en este juego, ajenos al peligro, sería muy embarazoso que el jefe viera a sus 'prescindibles' empleados, jugueteando con la falda de la secretaria de dirección, en lugar de estar trabajando con ímpetu, angustiado por la terrible crisis.
Era verdaderamente emocionante, que en cualquier momento alguien pudiera salir de su madriguera, nuestra conversación en doble sentido, seguía hasta que ella decidió subir un peldaño.
Con un hábil movimiento de manos, como si se arreglase la blusa, sacó sin que me diera cuenta los pezones de su sujetador, de modo que entre la sutil tela blanca de su blusa, sus pezones oscuros se transparentaban solo cubiertos por el fino tejido del tejido que transparentaba su forma y su color amplificando su efecto erótico
Confieso que al verlos ahí atrapados, bastantes veces los había imaginado, en estas tediosas y calurosas tardes de verano.
Se levantó de mi lado, estaba claro que quería ver formarse una 'carpa' de dimensiones aún mayores, avanzó varios pasos, siempre hablando en voz alta cosas sin interés, que hicieran creer a los de adentro que nada sucedía en la sala. Fue estrategia pura, te giraste a recoger una goma de borrar, me obligaste literalmente a ver el comienzo de tus glúteos, desde mi comprometida perspectiva.
Al darte la vuelta, estaba empitonada, sus pezones estaban totalmente erectos, convertidos en grandes chupetes que ansiaban ser saboreados.
La tensión erótica era cruel e insostenible. Lo notaba por el temblor en su voz y por el de la mía.
Luego lentamente y sin dejar de mirarme, metió una mano bajo su falda, sacó un dedo, brillante inundado de sus propios jugos lo metió en su boca y sonriendo pícaramente me preguntastó:
-¿ Te gustaría probarlo?
Apoyado sobre los talones y las piernas abiertas y extendidas, aquello fue detonante para que, de una forma traicionera la silla y sus malditas ruedas salieran disparadas, dando con gran estrépito contra una cristalera, la impresora laser se desplomó, al caer explotaron las lámparas con un fogonazo impresionante, mientras intenté agarrarme en la esquina de una mesa, con las carpetas de clientes preferentes, que se vinieron al suelo conmigo, doblándose, abriéndose y enterrándome entre fichas de información ahora totalmente desclasificada, me olvidé que la 'tienda de campaña' seguía ahí, casi sin poder reaccionar ante las puertas que se abrieron, por todas partes salieron oficinistas gritando, extintores vaciándose pensando que habíamos sufrido un ataque terrorista, me confundieron con un suicida islamista y que en mi abultada bragueta había una bomba alojada, la voz del jefe sonó atronadora, mientras algunos hacían fotos con el movil a mi abultada 'carpa':
-Bueno ya hemos resuelto el primer despido. Por cierto abróchese de una vez los pantalones.
Noté como el jefe le daba una palmadita de aprobación casi imperceptible en el culo, disimulaste, te alisaste la falda y de una forma casi mecánica alojaste los pezones en su sitio original, la fiesta visual se había acabado.
En el finiquito que amablemente me entregó, a lápiz muy flojito hay un número de móvil.
Donde las dan las toman
Dos horas interminables de reunión, tensión en el ambiente, agotamiento mental, la empresa no es viable, contención de gastos, nadie es imprescindible, es decir que para que la empresa funcione, algunos sobramos, hay que trabajar duro para rentabilizar este proyecto, etc. etc.
La atractiva secretaria, trajo unos bocadillos y unas cervezas para distensionar el ambiente. Mientras movía la mandíbula con desgana, se me escapó una mirada, intenté disimular, pero una sonrisa, demostró que había quedado en evidencia, estaba distraido con ese triángulo oscuro que se formaba a través de su falda ligeramente subida, a través del vidrio de la mesa.

¿Estaría conjuntado con el resto de su indumentaria? Ocurrencias obscenas, pero relajantes, de modo que propiné un trago largo a la cerveza y mientras su frio sabor inundaba mi garganta, inesperadamente cruzó las piernas, me dió morbo pués esto significaba que a pesar de su indiferencia, estaba pendiente de mi mirada extraviada.
Pude percatarme que no usaba ropa interior… me ruboricé al descubrir que miraba atentamente mi reacción, mi cara debió delatarme, pensé que cerraría las piernas al sentirse observada, hizo justo lo contrario, parecía empeñada en que no acertara ni una pauta de su seductor comportamiento.
Me excité muchísimo, pero lo disimulé, cruzando mis propias piernas para abortar los efectos de la excitación, otro trago, esta vez mirando solo el botellín, concentrándome en descifrar su etiqueta.
Desde luego no iba a permitir que se notaran mis debilidades por las piernas de la 'secre'.
Cuando todos entraron en sus despachos colindantes, quedamos a solas en la sala, me ofrecí a ayudarla a recoger los restos del almuerzo, se paró frente a mi…
Me estaba tentando, con una franca sonrisa, mirando descaradamente hacía mi entrepierna, como se abultaba mi 'paquete' al compás de sus movimientos, sabiendo que estabamos relativamente solos en la sala de reuniones.
Notó mi nerviosismo, se sentó a mi lado, surgió una superficial conversación, acerca de lo bien que escribían los bolis 'bic' de última generación, lo bien que se adaptaban en la mano, sobre la suavidad de los nuevos tipos de folios, lo bien que queda la tinta azul sobre el papel blanco, era excitante comprobar como esa conversación metafórica fluía sin parar, el tono de la voz eran deliciosamente suave, con las palabras lentas y sensuales que se interrumpían por momentos, lo que nos obligaba a acercarnos, sustituyéndose a veces por largos intercambios de miradas, su perfume empezó a invadirme, eso me recordó la ausencia de ropa interior, un hecho que me costaba olvidar. Entonces sentí un dolor aprisionante, abrí las piernas para liberarme un poco, me gustó comprobar como la vista se le quedó fijada en la pirámide incipiente, que se había formado en la base de mi entrepierna, con la tela de mis pantalones claros de pinzas, ella no podía apartar la vista, dejé que el 'asunto' creciera, hasta que el mastil enhiesto dejó toda la salvaje evidencia al descubierto, rozaste con el dorso de tu mano mi entrepierna en un gesto aparentemente improvisado, devolví el cumplido táctil acariciando sus rodillas desnudas, eran muy suaves y estaban sudorosas.

Estabamos disfrutando en este juego, ajenos al peligro, sería muy embarazoso que el jefe viera a sus 'prescindibles' empleados, jugueteando con la falda de la secretaria de dirección, en lugar de estar trabajando con ímpetu, angustiado por la terrible crisis.
Era verdaderamente emocionante, que en cualquier momento alguien pudiera salir de su madriguera, nuestra conversación en doble sentido, seguía hasta que ella decidió subir un peldaño.
Con un hábil movimiento de manos, como si se arreglase la blusa, sacó sin que me diera cuenta los pezones de su sujetador, de modo que entre la sutil tela blanca de su blusa, sus pezones oscuros se transparentaban solo cubiertos por el fino tejido del tejido que transparentaba su forma y su color amplificando su efecto erótico
Confieso que al verlos ahí atrapados, bastantes veces los había imaginado, en estas tediosas y calurosas tardes de verano.
Se levantó de mi lado, estaba claro que quería ver formarse una 'carpa' de dimensiones aún mayores, avanzó varios pasos, siempre hablando en voz alta cosas sin interés, que hicieran creer a los de adentro que nada sucedía en la sala. Fue estrategia pura, te giraste a recoger una goma de borrar, me obligaste literalmente a ver el comienzo de tus glúteos, desde mi comprometida perspectiva.
Al darte la vuelta, estaba empitonada, sus pezones estaban totalmente erectos, convertidos en grandes chupetes que ansiaban ser saboreados.
La tensión erótica era cruel e insostenible. Lo notaba por el temblor en su voz y por el de la mía.
Luego lentamente y sin dejar de mirarme, metió una mano bajo su falda, sacó un dedo, brillante inundado de sus propios jugos lo metió en su boca y sonriendo pícaramente me preguntastó:
-¿ Te gustaría probarlo?
Apoyado sobre los talones y las piernas abiertas y extendidas, aquello fue detonante para que, de una forma traicionera la silla y sus malditas ruedas salieran disparadas, dando con gran estrépito contra una cristalera, la impresora laser se desplomó, al caer explotaron las lámparas con un fogonazo impresionante, mientras intenté agarrarme en la esquina de una mesa, con las carpetas de clientes preferentes, que se vinieron al suelo conmigo, doblándose, abriéndose y enterrándome entre fichas de información ahora totalmente desclasificada, me olvidé que la 'tienda de campaña' seguía ahí, casi sin poder reaccionar ante las puertas que se abrieron, por todas partes salieron oficinistas gritando, extintores vaciándose pensando que habíamos sufrido un ataque terrorista, me confundieron con un suicida islamista y que en mi abultada bragueta había una bomba alojada, la voz del jefe sonó atronadora, mientras algunos hacían fotos con el movil a mi abultada 'carpa':
-Bueno ya hemos resuelto el primer despido. Por cierto abróchese de una vez los pantalones.
Noté como el jefe le daba una palmadita de aprobación casi imperceptible en el culo, disimulaste, te alisaste la falda y de una forma casi mecánica alojaste los pezones en su sitio original, la fiesta visual se había acabado.
En el finiquito que amablemente me entregó, a lápiz muy flojito hay un número de móvil.
Donde las dan las toman
Dos horas interminables de reunión, tensión en el ambiente, agotamiento mental, la empresa no es viable, contención de gastos, nadie es imprescindible, es decir que para que la empresa funcione, algunos sobramos, hay que trabajar duro para rentabilizar este proyecto, etc. etc.
La atractiva secretaria, trajo unos bocadillos y unas cervezas para distensionar el ambiente. Mientras movía la mandíbula con desgana, se me escapó una mirada, intenté disimular, pero una sonrisa, demostró que había quedado en evidencia, estaba distraido con ese triángulo oscuro que se formaba a través de su falda ligeramente subida, a través del vidrio de la mesa.

¿Estaría conjuntado con el resto de su indumentaria? Ocurrencias obscenas, pero relajantes, de modo que propiné un trago largo a la cerveza y mientras su frio sabor inundaba mi garganta, inesperadamente cruzó las piernas, me dió morbo pués esto significaba que a pesar de su indiferencia, estaba pendiente de mi mirada extraviada.
Pude percatarme que no usaba ropa interior… me ruboricé al descubrir que miraba atentamente mi reacción, mi cara debió delatarme, pensé que cerraría las piernas al sentirse observada, hizo justo lo contrario, parecía empeñada en que no acertara ni una pauta de su seductor comportamiento.
Me excité muchísimo, pero lo disimulé, cruzando mis propias piernas para abortar los efectos de la excitación, otro trago, esta vez mirando solo el botellín, concentrándome en descifrar su etiqueta.
Desde luego no iba a permitir que se notaran mis debilidades por las piernas de la 'secre'.
Cuando todos entraron en sus despachos colindantes, quedamos a solas en la sala, me ofrecí a ayudarla a recoger los restos del almuerzo, se paró frente a mi…
Me estaba tentando, con una franca sonrisa, mirando descaradamente hacía mi entrepierna, como se abultaba mi 'paquete' al compás de sus movimientos, sabiendo que estabamos relativamente solos en la sala de reuniones.
Notó mi nerviosismo, se sentó a mi lado, surgió una superficial conversación, acerca de lo bien que escribían los bolis 'bic' de última generación, lo bien que se adaptaban en la mano, sobre la suavidad de los nuevos tipos de folios, lo bien que queda la tinta azul sobre el papel blanco, era excitante comprobar como esa conversación metafórica fluía sin parar, el tono de la voz eran deliciosamente suave, con las palabras lentas y sensuales que se interrumpían por momentos, lo que nos obligaba a acercarnos, sustituyéndose a veces por largos intercambios de miradas, su perfume empezó a invadirme, eso me recordó la ausencia de ropa interior, un hecho que me costaba olvidar. Entonces sentí un dolor aprisionante, abrí las piernas para liberarme un poco, me gustó comprobar como la vista se le quedó fijada en la pirámide incipiente, que se había formado en la base de mi entrepierna, con la tela de mis pantalones claros de pinzas, ella no podía apartar la vista, dejé que el 'asunto' creciera, hasta que el mastil enhiesto dejó toda la salvaje evidencia al descubierto, rozaste con el dorso de tu mano mi entrepierna en un gesto aparentemente improvisado, devolví el cumplido táctil acariciando sus rodillas desnudas, eran muy suaves y estaban sudorosas.

Estabamos disfrutando en este juego, ajenos al peligro, sería muy embarazoso que el jefe viera a sus 'prescindibles' empleados, jugueteando con la falda de la secretaria de dirección, en lugar de estar trabajando con ímpetu, angustiado por la terrible crisis.
Era verdaderamente emocionante, que en cualquier momento alguien pudiera salir de su madriguera, nuestra conversación en doble sentido, seguía hasta que ella decidió subir un peldaño.
Con un hábil movimiento de manos, como si se arreglase la blusa, sacó sin que me diera cuenta los pezones de su sujetador, de modo que entre la sutil tela blanca de su blusa, sus pezones oscuros se transparentaban solo cubiertos por el fino tejido del tejido que transparentaba su forma y su color amplificando su efecto erótico
Confieso que al verlos ahí atrapados, bastantes veces los había imaginado, en estas tediosas y calurosas tardes de verano.
Se levantó de mi lado, estaba claro que quería ver formarse una 'carpa' de dimensiones aún mayores, avanzó varios pasos, siempre hablando en voz alta cosas sin interés, que hicieran creer a los de adentro que nada sucedía en la sala. Fue estrategia pura, te giraste a recoger una goma de borrar, me obligaste literalmente a ver el comienzo de tus glúteos, desde mi comprometida perspectiva.
Al darte la vuelta, estaba empitonada, sus pezones estaban totalmente erectos, convertidos en grandes chupetes que ansiaban ser saboreados.
La tensión erótica era cruel e insostenible. Lo notaba por el temblor en su voz y por el de la mía.
Luego lentamente y sin dejar de mirarme, metió una mano bajo su falda, sacó un dedo, brillante inundado de sus propios jugos lo metió en su boca y sonriendo pícaramente me preguntastó:
-¿ Te gustaría probarlo?
Apoyado sobre los talones y las piernas abiertas y extendidas, aquello fue detonante para que, de una forma traicionera la silla y sus malditas ruedas salieran disparadas, dando con gran estrépito contra una cristalera, la impresora laser se desplomó, al caer explotaron las lámparas con un fogonazo impresionante, mientras intenté agarrarme en la esquina de una mesa, con las carpetas de clientes preferentes, que se vinieron al suelo conmigo, doblándose, abriéndose y enterrándome entre fichas de información ahora totalmente desclasificada, me olvidé que la 'tienda de campaña' seguía ahí, casi sin poder reaccionar ante las puertas que se abrieron, por todas partes salieron oficinistas gritando, extintores vaciándose pensando que habíamos sufrido un ataque terrorista, me confundieron con un suicida islamista y que en mi abultada bragueta había una bomba alojada, la voz del jefe sonó atronadora, mientras algunos hacían fotos con el movil a mi abultada 'carpa':
-Bueno ya hemos resuelto el primer despido. Por cierto abróchese de una vez los pantalones.
Noté como el jefe le daba una palmadita de aprobación casi imperceptible en el culo, disimulaste, te alisaste la falda y de una forma casi mecánica alojaste los pezones en su sitio original, la fiesta visual se había acabado.
En el finiquito que amablemente me entregó, a lápiz muy flojito hay un número de móvil.
viernes, 17 de julio de 2009
Viaje Astral

Angelina Jolie versus Jennifer Aniston

La lista anual de actrices mejor pagadas de Hollywood, Jennifer Aniston volvió a perder ante su rival a muerte, Angelina Jolie. No hay mucha diferencia, Angie hizo 27 millones de dólares, contra los 25 de Jennifer.
- 1 – Angelina Jolie, $27 million
2 – Jennifer Aniston, $25 million
3 – Meryl Streep, $24 million
4 – Sarah Jessica Parker, $23 million
5 – Cameron Diaz, $20 million
6 – Sandra Bullock, $15 million
6 – Reese Witherspoon, $15 million
8 – Nicole Kidman, $12 million
8 – Drew Barrymore, $12 million
10 – Renee Zellweger, $10 million
11 – Cate Blanchett, $8 million
12 – Anne Hathaway, $7 million
12 – Halle Berry, $7 million
14 – Scarlett Johansson, $5.5 million
15 – Kate Winslet, $2 million

jueves, 16 de julio de 2009
Una rubia muy morbosa

miércoles, 15 de julio de 2009
Cinco síntomas

Primero, su rostro se sonrojó, cuando le hice una observación acerca de sus pierna

Segundo, sus pezones se van pusieron rígidos y se le humedeció ligeramente la nariz y todo por un leve roce en la blusa por quitarle una pelusilla, el caso es que las fosas nasales se dilataron y su boca se abría sin motivos aparentes. Mientras las palmas de las manos se volvieron frías y sudorosas.
Tercero, se le secó la boca y tragaba saliva sin parar, su respiración pasó a ser irregular, solo por retirar lentamente la mano que torpemente se quedó entre sus pechos. Su cuerpo se movía lentamente de arriba hacía abajo, las yemas de sus dedos acariciaban la pulida superficie de los peones lentamente, empezando por su cabeza esférica y bajando lentamente.
Cuarto, sus muslos se retorcieron sobre si mismos, con pequeños espasmos, rozándose entre si, dejando entrever su principio para al fin abrirse descaradamente de piernas y mostrar su lencería blanca y el inacesible interior de sus muslos.
-¿Vas a mover pieza? ¿Si o no?
Desconocido
Estaba en mi cuarto muy sola, quizás demasiado... junto a la ventana, viendo como la luna llega y el sol se marcha...Bebía leche de una botella y notaba como dos hilillos se deslizaban entre mis pechos, me hacían cosquillitas.
Mis ojos contemplaban el infinito de aquella tonta noche... de aquella luna llena que alumbraba los escondrijos más insignificantes, una noche como las demás .... De repente noté como una presencia oscura detrás de mí, una cosa chunga misteriosa me dió musho yu-yu. El caso es que lentamente se acercaba y yo ahí seguía en mi cuarto, mas sola que nunca con la botella de leche en la boca.

Él se acercó a mi oído y susurró lo mucho que me deseaba, sus manos acariciaban mi nuca... mi cabello... Su voz estremecía mi cuerpo, agitaba mi aliento.....
Intenté hablar, no me salían las palabras, solo me salían palabras inacabadas comidas por unos gemidos, el asunto era peor de lo que pensaba, pero uno de sus dedos se posó en mis labios para acariciarlos y para que no dijera nada , me estaba seduciendo... me estaba excitando.
Mis grandes pechos al descubierto llenos de leche, warros para el. Besó mi cuello, deslizó su lengua por el y lo saboreo, despacito bajo por mi escote en busca de la leche que aún se deslizaba por uno de mis pechos. Su mirada penetrante no dejaba de observarme mientras uno de mis pechos se adentraba en su boca cálida y húmeda ...
Mi aliento excitado y mis ojos invadidos por el deseo ya no furulaban bien. No sabía lo que hacía, me vi a mi misma restreguando mis pechos por su cara y casi perdí el control o quizás sin el 'casi'.
Él atraía mi cuerpo contra el suyo, me besaba por todos lados, decidió detenerse en mi ombligo y hundir su lengua dentro de él... mientras me tocaba mi sexo humedecido de placer... Mi sexo impaciente lo esperaba.... él me miro... sonrió con picardía y en vez de pasar de mi ombligo a mi sexo, pasó de mi ombligo a uno de mis muslos..dejó que su lengua lo recorriera hasta llegar a lo que yo tanto deseaba, tanto ansiaba....mmmmmmmmmh Uahhhh !!!
¡¡¡Que cabrón !!! ¡¡¡Como me conocía así!!!

Entonces su boca lo apoderó, mi cuerpo se removía, mi excitación acrecentaba y mis ojos repletos de lágrimas brillaban con mas poderío...hhhmmmhhh !!!
Levantó su cabeza y quiso acercarse a mis labios, que aun no los había catado, primero beso mi labio inferior y con la puntita de su lengua saboreo el superior, hasta besarme como nadie me había besado.... ese beso con sabor a mi y a el me excito aun mas... Empecé a acariciar su pecho, no podía quedarme mas tiempo quieta... lo deseaba, y anhelaba ser suya en ese mismo instante...
Asomé mi lengua y saboreé su piel lentamente me deslice en dirección a su sexo, ahora él era el que estaba inmóvil y expectante y yo la que hacia florecer el placer en su interior...Cogí en mi mano su sexo húmedo y excitado, arrime mis pechos contra el para sentirlo...mis pezones tocaban su glande y se mojaban del liquido preseminal ...baje y deje que mi lengua explorara cada centímetro de él... hmmmm
Noté como su cuerpo se estremecía y sus manos se introducían por mi cabello....masajeando mi cabeza. Mientras mi lengua seguía apoderándose de el... haciéndolo crecer dentro de mi haciéndolo mío...¡¡¡ Dios que bien sabía ese semen !!!
Me gustaba sentirlo en mi garganta y lo introducía dentro de mi boca mas y mas... mientras con mi otra mano me tocaba un poquito mi clítoris que estaba hinchado y durito me tocaba casi sin darme cuenta de lo que hacia...estaba como loca y quería mi recompensa...quería que explotara en mi garganta...El ritmo acrecentaba... sus manos me guiaban el camino para hacerle gozar...mas dentro...PORFAAAAAAAAAAAAAA FUERTEEEEEEE !!!!.. mas dentro hmmmmm siiii, la excitación aumentaba... notaba como su cuerpo era mío como se rendía ante mi y dejaba que su piel fuera completamente mía... sentí el calor en mi garganta y fue en ese mismo instante cuando me vino a mi también un orgasmo... nos miramos y sonreimos....
-Por cierto he entrado para decirte que te habías dejado la puerta de tu casa abierta, soy el vecino ;-)